A
pesar del frío de esta pequeña ciudad al norte de Myanmar, Hsipaw terminó atrapándonos. El mayor atractivo es el trekking por sus
alrededores, siempre verdes y salpicados de estupas y, sobre todo,
ver cómo pasan la vida sus alegres habitantes, siempre dispuestos a
brindarte conversación y una sonrisa.